Recetas

En nuestra sección de recetas, nos complace compartir contigo la pasión y el amor que sentimos por la cocina. Aquí encontrarás una selección de recetas exclusivas de La Cueva del Nagual, donde revelamos los secretos detrás de nuestros platillos más emblemáticos y te enseñamos cómo prepararlos en la comodidad de tu hogar.

Descubre las técnicas y los ingredientes que hacen de nuestros platillos una experiencia única y mágica, fusionando la tradición culinaria de México con recetas de todo el mundo. Desde nuestras exquisitas pizzas a la leña y lasañas, hasta los deliciosos postres y bebidas, te invitamos a sumergirte en el mundo de la gastronomía y a experimentar la alegría de cocinar.

No dudes en explorar esta sección y poner en práctica las recetas que compartimos. Además, si tienes preguntas o deseas compartir tus propias creaciones inspiradas en La Cueva del Nagual, te invitamos a conectarte con nosotros a través de nuestras redes sociales o la sección de contacto.

¡Aventúrate en la cocina y déjate guiar por nuestras recetas para crear momentos mágicos e inolvidables junto a tus seres queridos!

Masa de pizza delgada y crujiente

Prepárate para disfrutar de una deliciosa pizza casera con nuestra receta de masa de pizza delgada y crujiente. Con esta base, podrás experimentar con diferentes ingredientes y sabores para crear tus propias obras maestras culinarias.

Ingredientes:

2 tazas (500 g) de harina de trigo (puedes utilizar harina de trigo integral o 00 si lo prefieres)
1 cucharadita (5 g) de azúcar
1 cucharadita (5 g) de sal
1 cucharada (15 g) de levadura seca activa
3/4 taza (180 ml) de agua tibia
2 cucharadas (30 ml) de aceite de oliva
Instrucciones:

En un tazón pequeño, combina la levadura seca activa y el agua tibia. Deja reposar durante 5-10 minutos, hasta que la levadura se active y forme una espuma en la superficie.

En un tazón grande, mezcla la harina, el azúcar y la sal. Agrega la mezcla de levadura y agua, y el aceite de oliva. Mezcla hasta que se forme una masa homogénea.

Amasa la masa sobre una superficie enharinada durante unos 10 minutos, hasta que esté suave y elástica. Si la masa está demasiado pegajosa, añade un poco más de harina.

Forma una bola con la masa y colócala en un tazón aceitado. Cubre el tazón con un paño húmedo y deja reposar la masa en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que haya duplicado su tamaño.

Precalienta el horno a 475°F (245°C). Si tienes una piedra para pizza, colócala en el horno mientras se calienta.

Una vez que la masa haya reposado, divídela en dos porciones iguales (si deseas hacer dos pizzas delgadas) y estírala sobre una superficie enharinada hasta obtener el grosor deseado. Asegúrate de que la masa esté lo más delgada posible para obtener una textura crujiente.

Coloca la masa estirada sobre una bandeja para hornear o en la piedra para pizza precalentada. Agrega tus ingredientes favoritos y hornea durante 10-15 minutos, hasta que la masa esté dorada y crujiente.

Retira la pizza del horno y déjala enfriar durante unos minutos antes de cortarla en porciones. ¡Disfruta de tu pizza casera delgada y crujiente!

Esta receta de masa de pizza delgada y crujiente es la base perfecta para experimentar con diferentes combinaciones de ingredientes y sabores. ¡Deja volar tu imaginación y crea tus propias obras maestras culinarias en la cocina!

Pasta a la boloñesa

La pasta a la boloñesa es un clásico de la cocina italiana, que combina una deliciosa salsa de carne con tomate y hierbas sobre pasta al dente. Esta receta es perfecta para una comida reconfortante y sabrosa, que se disfruta mejor acompañada de una ensalada fresca y pan crujiente.

Ingredientes:

400 g de pasta (por ejemplo, espaguetis, fettuccine o tagliatelle)
2 cucharadas (30 ml) de aceite de oliva
1 cebolla mediana, picada finamente
2 dientes de ajo, picados finamente
1 zanahoria mediana, picada finamente
1 tallo de apio, picado finamente
500 g de carne molida de res (o una mezcla de res y cerdo)
1 lata (28 oz o 800 g) de tomates enteros pelados, triturados
1/2 taza (120 ml) de vino tinto (opcional)
2 cucharadas (30 g) de pasta de tomate
1 cucharadita (5 g) de azúcar
1 cucharadita (5 g) de sal
1/2 cucharadita (2.5 g) de pimienta negra recién molida
1 cucharada (15 g) de orégano seco
1 cucharada (15 g) de albahaca seca
1 hoja de laurel
Queso parmesano rallado, para servir
Instrucciones:

Calienta el aceite de oliva en una cacerola grande a fuego medio. Añade la cebolla, el ajo, la zanahoria y el apio, y sofríe durante 5-7 minutos, hasta que las verduras estén tiernas y ligeramente doradas.

Añade la carne molida a la cacerola y cocina hasta que esté bien dorada, desmenuzándola con una cuchara de madera mientras se cocina. Drena el exceso de grasa si es necesario.

Si estás utilizando vino tinto, añádelo a la cacerola y cocina a fuego medio-alto hasta que se haya reducido a la mitad. Si no utilizas vino, puedes omitir este paso.

Agrega los tomates triturados, la pasta de tomate, el azúcar, la sal, la pimienta negra, el orégano, la albahaca y la hoja de laurel a la cacerola. Mezcla bien todos los ingredientes y lleva la salsa a ebullición.

Reduce el fuego a bajo y cocina a fuego lento durante 30-45 minutos, revolviendo ocasionalmente. La salsa se espesará y los sabores se concentrarán durante este tiempo.
Mientras la salsa se cocina, cocina la pasta en una olla grande con agua hirviendo y sal hasta que esté al dente, siguiendo las instrucciones del paquete. Escurre la pasta y resérvala.

Prueba la salsa boloñesa y ajusta la sal y las especias según sea necesario. Retira la hoja de laurel y descártala.

Para servir, mezcla la pasta cocida y escurrida con la salsa boloñesa caliente, asegurándote de que la pasta esté bien cubierta. También puedes servir la salsa sobre la pasta en los platos individuales, según tus preferencias.

Espolvorea generosamente con queso parmesano rallado y acompaña con pan crujiente y una ensalada fresca, si lo deseas.

Esta receta de pasta a la boloñesa es perfecta para una comida reconfortante y sabrosa que seguramente complacerá a toda la familia. ¡Buon appetito!

Chimichurri argentino

El chimichurri es una salsa tradicional argentina que se utiliza principalmente como aderezo para carnes asadas o a la parrilla. Está hecho a base de hierbas, ajo, aceite de oliva y vinagre, y su sabor es fresco y ligeramente picante. Aquí tienes una receta fácil de chimichurri argentino para que puedas disfrutarlo en casa.

Ingredientes:

1 taza (aprox. 30 g) de perejil fresco, finamente picado
1/4 taza (aprox. 10 g) de cilantro fresco, finamente picado (opcional)
3-4 dientes de ajo, finamente picados o prensados
1/2 taza (120 ml) de aceite de oliva
1/4 taza (60 ml) de vinagre de vino tinto o vinagre de manzana
1 cucharadita (5 g) de orégano seco
1/2 cucharadita (2.5 g) de hojuelas de pimiento rojo (ajuste según su tolerancia al picante)
1/2 cucharadita (2.5 g) de pimienta negra recién molida
1/2 cucharadita (2.5 g) de sal
Instrucciones:

En un tazón mediano, combina el perejil picado, el cilantro (si lo utilizas) y el ajo picado. Mezcla bien para integrar los ingredientes.

Añade el aceite de oliva, el vinagre de vino tinto, el orégano seco, las hojuelas de pimiento rojo, la pimienta negra y la sal al tazón con las hierbas y el ajo. Mezcla bien todos los ingredientes hasta que estén bien combinados.

Deja reposar el chimichurri a temperatura ambiente durante al menos 30 minutos antes de servir, para permitir que los sabores se mezclen y se intensifiquen. Si puedes, déjalo reposar en el refrigerador por un par de horas o incluso toda la noche para obtener un sabor más profundo.

Prueba y ajusta la sal y el picante al gusto. Si el chimichurri te parece muy ácido, puedes agregar un poco más de aceite de oliva para suavizar el sabor.

Almacena el chimichurri en un frasco hermético en el refrigerador hasta por una semana. Asegúrate de dejar que vuelva a temperatura ambiente antes de servir, ya que el aceite de oliva se solidifica en el frío.

El chimichurri argentino es perfecto para servir con carnes a la parrilla, como el tradicional asado argentino, pollo o incluso pescado. También puedes utilizarlo como aderezo para ensaladas o para dar sabor a empanadas y otros platillos. ¡Disfruta de este delicioso sabor argentino en tus comidas!

Salsa de pizza casera

Una deliciosa salsa de pizza es esencial para resaltar los sabores de tus ingredientes favoritos y completar tu pizza casera. Esta receta de salsa de pizza es fácil de preparar y está llena de sabor, perfecta para combinar con nuestra masa de pizza delgada y crujiente.

Ingredientes:

1 lata (28 oz o 800 g) de tomates enteros pelados
2 dientes de ajo, picados finamente
1 cucharada (15 ml) de aceite de oliva
1 cucharadita (5 g) de azúcar
1 cucharadita (5 g) de sal
1/2 cucharadita (2.5 g) de pimienta negra recién molida
1 cucharada (15 g) de orégano seco
1 cucharada (15 g) de albahaca seca
1/2 cucharadita (2.5 g) de hojuelas de pimiento rojo (opcional)
Instrucciones:

En una licuadora o procesador de alimentos, tritura los tomates pelados hasta obtener una consistencia suave. Si prefieres una salsa con más textura, puedes triturarlos menos.

Calienta el aceite de oliva en una cacerola grande a fuego medio. Añade el ajo picado y sofríe durante 1-2 minutos, hasta que esté fragante y ligeramente dorado. Ten cuidado de no quemar el ajo.

Agrega los tomates triturados a la cacerola junto con el azúcar, la sal, la pimienta negra, el orégano, la albahaca y las hojuelas de pimiento rojo (si las utilizas). Mezcla bien todos los ingredientes.

Lleva la salsa a ebullición, luego reduce el fuego a bajo y cocina a fuego lento durante 20-30 minutos, revolviendo ocasionalmente. La salsa se espesará y los sabores se concentrarán durante este tiempo.

Prueba la salsa y ajusta la sal, las especias y el azúcar según sea necesario. Si deseas una salsa más espesa, cocina a fuego lento durante unos minutos adicionales.

Deja que la salsa de pizza se enfríe un poco antes de usarla en tu pizza casera. Si tienes sobras, puedes guardarlas en un recipiente hermético en el refrigerador por hasta una semana o congelarlas para su uso futuro.

Esta receta de salsa de pizza casera es el complemento perfecto para nuestra masa de pizza delgada y crujiente. ¡Combínala con tus ingredientes favoritos y disfruta de una pizza deliciosa y auténtica en casa!